Paseos de un aprendiz de montañero

Mayo 2015 - Los Guerreros y ruta de los Pinganillos

Si en algo estamos de acuerdo la inmensa mayoría de los "guadarramistas" es en la inmensa suerte que tenemos de contar con la Pedriza. Desde los que la utilizan como un simple lugar para darse un paseo por la "autopista" o los bañistas de la concurridísima Charca Verde hasta los amantes del alto grado de dificultad en escalada. Entre medias hay excursionistas y montañeros.

 

El dicho popular de "a la tercera va la vencida" se vuelve a repetir y tras dos intentos fallidos de encontrar acceso "del todo a cien" a Los Guerreros, por fin encuentro la forma de, sin pasar demasiado miedo, quedarme a 10 m de la cumbre, porque después de estudiar detenidamente la zona, creo que si no se escala no se hace cumbre por lo que si tuviéramos una Miss Havley (la jueza de los ochomiles) no habría contado esta en mi dilatada cuenta de cumbres realizadas por la puerta de atrás.

 

Tras darme cuenta de que me he dejado en casa la cartera y el teléfono emprendo camino un poco mosqueado. Al poco rato de caminar por la autopista se abre la vista a la cuerda de los Pinganillos, con el Risco del Pájaro en el centro y a su derecha el de los Guerreros. Dicen que hay que ver a un guerrero montado en su cabalgadura. Yo lo más que veo son dos cabezas, una superpuesta a la otra.

Dejando sin cruzar el puente de madera se continúa por el camino que accede al circo posterior. Tras cruzar el arroyo de los Poyos por la primera de sus vaguadas, paso por la Calavera y llego a la base del Platillo Volante. Otro risco precioso pero para el que hay que tener mucha imaginación para encontrar justificado su nombre

Bordeando el Platillo aparece la torre sin nombre ¿? a la que pude subir la semana pasada como premio de consolación al no encontrar el acceso a los Guerreros
También es una preciosidad...
Bordeando el Pájaro ya se ve el risco de La Muela con todos sus habitantes a la fresquita de la sombra.
 
 

Paso junto al callejón por el que se sube a la terraza donde he pasado tan buenos momentos con mis amigos.
A mi izquierda queda el risco conseguido la semana pasada. Creo que tiene bastantes más accesos relativamente fáciles pero prefiero tantearlos acompañado de alguien que controle la cuerda.
Tras pasar los vivacs de Los Guerreros, giro a la derecha por una placa donde recuerdo a mi Juanito y vuelvo a intentar todas las posibilidades buscando la solución de acceso a la cumbre. Los riscos al norte lucen majestuosos...
...Y sus habitantes siguen con su rutina
 
Finalmente encuentro la forma relativamente poco arriesgada de llegar al que creo es el punto más cercano a la cumbre. La cumbre en sí me parece inexpugnable sin un par de buenos gatos, veinte kilos menos y diez años, también menos.

Para hacer el último paso me descuelgo la mochila.

Al noreste la vista es inmejorable:

De izquierda a derecha: Cancho Butrón, Dos Torres, Gran Molondrio y en pequeñito el Mogote de los Suicidas

Al Sur la zona de los Fantasmas.
Por todas partes es impresionante
Y feliz por haber encontrado esta "cumbre sin honores" me hago lo que ahora llaman un "selfie" y toda la vida hemos llamado "la foto de uno mismo alargando el brazo"
Una enorme bañera preside la antecumbre

 
 
Después de un pequeño refrigerio inicio el descenso
Llegado de nuevo a la canal que asciende decido dejar a la derecha el Gran Molondrio...
Al que intento subir, como siempre buscando la ruta para ancianos, pero creo que no tiene por lo que aborto y continúo hacia arriba.

A golpe de zoom la cumbre de los Guerreros y por delante la de consolación a la que he accedido. Tampoco está tan mal. Me siento pletórico.

 
 
El Risco de los Suicidas aparece espectacular...
...Aunque aquí todo es espectacular.
Las Llamas y la Bola de Navajuelos ¿o la Falsa Bola?. Por detrás y en el centro se cuela la Maza
Paso bordeando el Cancho de Las Biólogas al que consigo ascender. Para hacer cumbre hay un paso un poco comprometido por lo que yendo solo y sin conocer me pongo caso, arnés con cacharritos y me cuelgo a la espalda la cuerda.
Bendita decisión. Me ha venido de maravilla para bajar

 
 

por delante, al noreste tengo Cancho Paquete. Este parece menos accesible. Por si acaso no me quito el disfraz y continúo bordeándolo.

Después de un par de intentos, cumbre. (Vale, señora Havley, me he quedado a tres metros). Ya van tres hoy.
Estoy al lado del Cancho de la Herrada (Pared de Santillana) y ya que estamos... "parriba", donde encuentro a unos escaladores que han subido por la sur. Se extrañan de ver al abuelo con sus bastones trepando el último pedrusco cimero.

Una vez abajo decido volver a Cantocochino por las amables zetas que descienden del Collado de la Ventana pero antes me fijo en el Risco del Moro que hace años que no piso su cumbre

Y como no hay cuatro sin cinco, otra vez a trepar.
Por su cara norte tiene pinta de tener varias zonas de acceso encordado pero sin dificultad. A ver si engaño al vasco...
 
El Risco de la Ventana
Dos Torres con un overbooking que parece la Carrera de San Jerónimo.
 
 
Ha sido un día espectacular. Solo hay un problema, me he dejado en casa la cartera, miro en mis bolsillos y encuentro cuatro lereles. Menos mal, me podré tomar la cervecita.

Ha sido un día glorioso. Creo que esta sería una ruta perfecta para la II marcha de los Amigos de Paco

Un abrazo a mi hipotético lector.